Voy a empezar la casa por el tejado, a ver si mientras escribo se me ocurre alguna batallita que contaros de mis aventuras en la carretera que pueda relacionar con Mayor of Kingstown.
Uno de los creadores de la serie es Taylor Sheridan que, entre otras lindezas, es el guionista de las dos pelis de Sicario, Hell or High Water y Wind River.
El otro es Hugh R. Dillon, un actor que nos suena de verle por ahí en un montón de series y del que he descubierto que es uno de los protas de Durham County, serie canadiense que no conocía de nada pero que tiene pintaza.
Aquí, en Mayor of Kingstown, también tiene un papel de poli duro junto al killer de la serie que es el actor Jeremy Renner.
Estos dos piezas maquinando han creado una serie dura, llena de adrenalina, cárceles repletas, bandas callejeras, pesas, sudor y clubes de striptease.
Todo bien para sentarse en el sofá y contemplar.
Mayor of Kingstown se puede ver en la nueva plataforma de streaming, SkyShowtime, y consta de dos temporadas de diez episodios cada una.
Si te das de alta ahora por 2,99 euros tienes para toda la vida, vamos, eso dicen ellos.
Ah, ya me ha venido algo a la cabeza, y es el día que, hace unos tres o cuatro años, el bueno de Carlos Zanón nos invitó a mi socio Dirty Lucini y a un servidor al BCNegra a contar unas cuantas mentiras sobre Dirty Works, junto a Dani, de la editorial Sajalín, y el chico de Sant Boi, Kiko Amat.
La charla fue en la cárcel Modelo que acababa de ser cerrada hacía solo unos meses.
Pasear por las galerías de la cárcel, ver las celdas y el frío que hacía allí dentro, impresionaba.
Y eso que la cosa se petó de público asistente y había calor humano para dar y regalar.
Aunque he de reconocer que lo que más me llamó la atención fue que las cisternas de los váteres estaban fuera de la celda, en la parte alta de la galería y protegidas por una malla de metal. El porqué lo desconozco.